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Número 686

27 de diciembre de 2019

LA UAM DESARROLLA POLÍMEROS PARA LIMPIAR EL AGUA

Y ABSORBER EL CO2 DEL AMBIENTE

*Judith Cardozo Martínez encabeza investigaciones auspiciadas con recursos públicos federales y locales

 

El uso de polímeros es muy importante en diversos campos de la investigación, pues en la medicina sustituirán y regenerarán ciertas áreas del organismo humano además de ser útiles en la elaboración de materiales y en procesos de potabilización del agua y combate a la contaminación atmosférica, afirmó la doctora Judith Cardoso Martínez, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

 

En el programa En contraste, transmitido por UAM Radio 94.1 FM, la profesora del Departamento de Física de la Unidad Iztapalapa de esta casa de estudios explicó que uno de los proyectos que ha desarrollado con su grupo de trabajo se centra en el diseño de una metodología para tratar el agua de las industrias que requieren de grandes cantidades del recurso, particularmente los autolavados, “en los que hemos puesto plantas prototipo que han permitido una recuperación de 95 por ciento”.

 

La investigadora nacional, Nivel II, del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) detalló que el material es de origen biológico y el polímero desencadena un proceso físico químico, que se adiciona al agua contaminada e interactúa con las partículas suspendidas que se aglomeran y por su tamaño se sedimentan, lo que permite limpiar el agua y el lodo obtenido sirve para la elaboración de compostas.

 

También están en desarrollo en colaboración con colegas del Instituto Politécnico Nacional resinas basadas en productos poliméricos para eliminar metales pesados –cromo 6 y arsénico– difíciles de remover del agua que se extrae de pozos profundos en zonas semiáridas, por medio de la electrodesionización en una celda electroquímica.

 

Otro trabajo está centrado en resinas para absorber y mitigar el dióxido de carbono (CO2) en el ambiente. Al concentrar el CO2 en las resinas será posible generar productos de mayor valor agregado para transformarlo en etanol, metanol, biocombustibles o bien otros compuestos que se usan como materia prima.

 

En el campo de la medicina, otro grupo de investigación está usando los polímeros para plataformas o soportes a fin de regenerar medula espinal, han estado trabajando en diferentes campos de la biomedicina para ayudar a personas que han sufrido accidentes y sufren daños de manera irreversible.

 

Los polímeros también son transportadores de fármacos para llegar a zonas dañadas del cuerpo, como en los casos de cáncer, en los que el polímero se introduce en determinada región para ser absorbido por el organismo.

 

En la actualidad la UAM trabaja en un laboratorio para el control de la calidad del agua que procesan las más de 800 purificadoras instaladas en la Alcaldía Iztapalapa, con la idea de cumplir con la Norma Oficial Mexicana (NOM) 201, que define las características y la calidad que debe tener el líquido para consumo humano.

 

La doctora Cardoso Martínez comentó que las investigaciones han recibido apoyo del Conacyt, la Secretaria de Ciencia y Tecnología de la Ciudad de México y la Casa abierta al tiempo.

 

La investigadora apuntó que seis por ciento del petróleo que se produce se usa para generar polímeros, pero también hay materiales de origen natural como la celulosa, los caparazones de moluscos o la cáscara de mango que pueden sustituir a aquellos que son problemáticos para el medio ambiente.

 

Los polímeros son materiales maravillosos, y en la actualidad son un nicho de oportunidad para resolver asuntos de contaminación que en el caso de México son varios y tienen poco desarrollo tecnológico generalmente lo que se trabaja es importado, concluyó la investigadora del Departamento de Física de la Unidad Iztapalapa.