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Número 554
14 de noviembre de 2017

“SI NO PUDIÉRAMOS ACERCARNOS DESDE NUESTRO PRESENTE AL PASADO,

NO HABRÍA SABIO ALGUNO”, MIGUEL LEÓN PORTILLA

*Inicia el ciclo Conferencias Magistrales Metropolitanas como parte de las celebraciones por los 45 años

de la UAM

 

*Participarán José Sarukhán, Carmen Aristegui, Eduardo Matos y Juan Villoro, entre otros


 

 

Es en la idea de entender el tiempo que la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) está abierta al tiempo pasado, al presente –porque está formada de seres humanos dignos y pensantes que dan sentido a esta valiosa institución– y al futuro, sostuvo el doctor Miguel León-Portilla, al inaugurar las Conferencias Magistrales Metropolitanas, convocadas por la Rectoría General.
Al disertar sobre el lema de la UAM –Casa abierta al tiempo, In Calli Ixcahuicopa, en náhuatl–el filósofo e historiador mexicano subrayó la trascendencia de la memoria que, “si no la tuviéramos, si no pudiéramos acercarnos desde nuestro presente al pasado, no habría sabio” alguno.
 
Hay tres divisiones indivisibles que unifican a aquel que vive en el tiempo y, aunque “casi nadie se preocupa por pensar acerca de esto, tiene mucho meollo” porque “todo lo que sabemos, sentimos o hacemos ocurre en el presente: en un presente como, estudio, llego a mi casa y todo esto tiene sentido por lo que hice”.
 
El pasado da la carga de las experiencias, pero no sólo eso, también las de otros seres humanos y, en última instancia, las de la humanidad, ya que es gracias a la memoria de lo ocurrido que existen la astronomía, la geología, la química, la física, la lingüística y la historia, entre otras, pero esta última –que es la rama del saber ocupada del ayer– es la que acerca a la persona a cuanto ha ocurrido, pensado y logrado.
 
El Doctor Honoris Causa por la UAM refirió que es en la idea de entender el tiempo que la universidad es concebida como “abierta al tiempo pasado, al tiempo presente, porque está formada de personajes pensantes que dan sentido a esta valiosa institución”, pero también está abierta al mañana.
Y, “¿qué significa eso si estamos en un punto entre el pasado y el futuro?”: que esta casa de estudios, así como funda su ser en toda la experiencia: la ciencia que es investigada y transmitida, la creación humana de siglos y milenios, se abre hacia el porvenir para hacer proyectos, formular programas de indagación y organizar ramas de estudio y de trabajo.
 
Con esta apertura la UAM adquiere una faceta “trascendental que la convierte en una gran universidad de México. Sigan por ese buen camino”, concluyó el autor de La visión de los vencidos y La filosofía náhuatl estudiada en sus fuentes.
 
Al dar la bienvenida al autor del lema –uno de los elementos principales de identidad– de la universidad, el doctor Eduardo Peñalosa Castro mencionó que en la génesis y la fundación de esta casa de estudios participaron algunas de las mentes más brillantes y lúcidas del país, aportando la concepción de una institución de educación superior moderna, flexible, sólida, basada en tradiciones propias y fincada en raíces sin las cuales sería imposible su existencia.
 
El Rector General anunció que la iniciativa de organizar las Conferencias Magistrales Metropolitanas responde al liderazgo que la universidad ejerce en la difusión y la divulgación de reflexiones de carácter científico, político o cultural por parte de algunas de las figuras más influyentes de esta época.
 
El doctor León-Portilla abrió el ciclo –primera actividad para celebrar los 45 años de la UAM, fundada en 1974– con la ponencia Significado del lema de la UAM: Casa abierta al tiempo, cuya versión en náhuatl es In Calli Ixcahuicopa, y será seguido por José Sarukhán Kermez, Carmen Aristegui, Juan Ramón de la Fuente, Eduardo Matos, Juan Villoro y José Ramón Cossío Díaz.
 
A la Conferencia asistieron este último, miembros de la Junta Directiva, rectores de Unidad, Abogado y coordinadores generales, así como directores de División.

 

La UAM, Casa abierta al tiempo... y a la solidaridad.

 

#LaUAMporMéxico

 

#CasaAbiertaALaSolidaridad