La Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) es una institución generosa que permite trabajar libremente en la cimentación dinámica de un mundo cambiante y complejo, además de fomentar comunidades académicas sólidas, centradas en intereses comunes, afianzadas por lazos de amistad, solidaridad, compañerismo y cariño, dijo la doctora Angélica Martínez de la Peña.

Al hablar en nombre de los galardonados del Premio a la Docencia en la Unidad Cuajimalpa de la UAM, resaltó que “esta institución está llena de gente valiosa y propositiva que busca constantemente la excelencia, la innovación y el bienestar social”.

La académica del Departamento de Teoría y Procesos del Diseño calificó a los alumnos de la Casa abierta al tiempo de especiales, en comparación con los de otras instituciones, porque son personas excepcionales, comprometidas, trabajadoras, y porque poseen un espíritu que no se doblega.

La doctora Martínez de la Peña expuso que ser profesor-investigador “es tener la oportunidad diaria de compartir, crecer, descubrir y coincidir con otras personas un tiempo específico, buscando la construcción de un nosotros y de un mundo diferente, y tal vez mejor, a través del conocimiento que funge como un puente que nos enlaza”.

El doctor Salvador Vega y León, rector general de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en calidad de invitado especial, expuso que el prestigio que ha forjado la institución durante 42 años de labores se ha fundamentado en el binomio docencia-investigación, el cual es sustento del modelo académico.

“Impartir educación superior procurando que nuestros alumnos respondan a las necesidades de una sociedad en constante evolución es la vía principal para cumplir nuestra filosofía universitaria y alcanzar los objetivos institucionales”, aseveró.

El premio a la docencia es uno de los reconocimiento de mayor trascendencia, pues subraya la actuación de los profesores que en apego al funcionamiento mismo del modelo académico, y más allá de ostentar un conocimiento profundo de su área de conocimiento, se caracteriza por desplegar procesos de reflexión orgánica en sus exposiciones, argumentos y juicios, volviendo al mero acto de transmisión de conocimientos en la fuente de la riqueza humanística más elemental.

El doctor Eduardo Peñalosa Castro, rector de la Unidad Cuajimalpa de la UAM, recordó que esta distinción se otorga a los docentes que realizan una destacada labor en el ámbito de la formación de los alumnos, por lo que gracias a su esfuerzo y dedicación la universidad brinda una educación que le permite a los estudiantes incorporarse al campo laboral y la formación académica a nivel de posgrado.

Los ganadores del XXV Premio a la docencia fueron los doctores Carlos Roberto Jaimez González, del Departamento de Tecnologías de la Información, y Angélica Martínez de la Peña, del Departamento de Teoría y Procesos del Diseño, de la División de Ciencias de la Comunicación y Diseño.

De la División de Ciencias Sociales y Humanidades fueron premiadas las doctoras Esther Morales Franco, adscrita al Departamento de Estudios Institucionales, y Zenia Yébenes Escardó, académica del Departamento de Humanidades.