LA IDENTIDAD MIXTECO-ZAPOTECA AMPLIADA AL MUNDO CONTEMPORÁNEO
*Tonas y nahuales presenta en la Sala Leopoldo Méndez de la Unidad Xochimilco obras de artistas de San Martín Tilcajete
| Figuras de animales en madera que deslumbran por su belleza, simbología y significado respecto de los elementos de la vida –tierra, agua, viento y fuego– en el mundo ritual mixteco-zapoteca son realizadas mediante propuestas nuevas de tallado y decoración por pobladores de San Martín Tilcajete, creadores de un arte que denominan etno-moderno.
La exposición Tonas y nahuales presentará –hasta el 27 de enero de 2017 en la Sala Leopoldo Méndez de la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)– 27 obras en formatos mediano y pequeño –en madera y copal fusionados con acero inoxidable y hoja de oro– realizadas en el taller de Jacobo & María Ángeles.
Los artesanos del pueblo ubicado en los valles centrales del estado de Oaxaca emplean iconografía mixteco-zapoteca en el desarrollo de un estilo único, acorde con la tradición que parte de una valoración profunda de sus orígenes.
El taller-cooperativa difunde la cultura local con la creación de los tonas, animales del calendario zapoteco, por ejemplo el nahual, cuya representación humana simboliza la fusión espiritual humano-animal. Una combinación de la luna, la fecha de nacimiento y las huellas en el techo del hogar definirá el animal que protegerá a cada persona a lo largo de su vida.
Los artesanos crean propuestas en tallado y decoración plasmando su imaginario y creatividad, herramienta indispensable para el desarrollo humano, además de que la realización de figuras zapotecas exige destreza, técnica y mente abierta en procesos que pueden durar meses o años.
Por tanto, el tiempo es eje fundamental del taller-cooperativa, donde cada pieza es elaborada por ocho personas, en promedio, que tallan, resanan, pintan y llevan a cabo tareas administrativas para el desarrollo del arte etno-moderno, que preserva la identidad zapoteca ampliada al mundo contemporáneo.
En el proceso de diseño, los artistas conservan la simbología e innovan, al incorporar a la madera incrustaciones de oro, plata y piedras preciosas, además de aplicar técnicas de pintura al óleo.
Las figuras no están estáticas y tienen vida con el significado étnico y cultural, pero sobre todo porque son irrepetibles y muestran la dedicación compartida por meses o años en el trabajo de hombres y mujeres.
El taller de Jacobo & María Ángeles –que considera arte todo lo hecho a mano, con el corazón, la calidad y rescatando la cultura de un pueblo– define su presencia en un recinto de la Casa abierta al tiempo como un honor y una oportunidad invaluable de demostrar que es posible vivir de este arte y que es necesario sentir orgullo de las raíces culturales.
Tonas y nahuales, organizada por la Coordinación de Extensión Universitaria de la citada sede académica, incluye alebrijes, colibríes y piezas de diversos motivos del ciclo Lo que se quedó en el tintero, en recuerdo del maestro René Avilés Fabila, Profesor Distinguido de la UAM fallecido en octubre pasado. |