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Número 465
12 de noviembre de 2016

RECINTOS Y RECUERDOS: LA INTERACCIÓN GENTE-CALLE-PLAZA

*Pintar sitios públicos es un placer porque permite el diálogo con la gente: Vicente Guzmán


 

 

 

Desde un rincón de alguna plaza, quizá cobijado a la sombra de un árbol, el pintor Vicente Guzmán Ríos observa y es observado. La cotidianidad inexorable transcurre frente a él y, así, comienza a trazar líneas dialogantes y susurrantes, caricias furtivas o guiños soñadores que hechizan el recuerdo de espacios públicos, compartidos, que germinan del agua y los colores.

 

Sitios entrañables de La Habana, Cuba; Cartagena de Indias, Colombia; Chiapas, Estado de México, Michoacán y la Ciudad de México, en el país, han quedado inmortalizados en la muestra Recintos y recuerdos compuesta por 40 acuarelas que desde el 22 de octubre han estado en exhibición en el Museo de Historia de Tlalpan.

 

En entrevista, el profesor del Departamento de Teoría y Análisis de la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) comentó que pintar sitios públicos significa un enorme placer porque abre un diálogo con los transeúntes. “Me ubico en una banca o en un banquito que siempre cargo y la gente se acerca a ver mi trabajo y es así que iniciamos una charla”.

 

El artista, quien desde muy pequeño ha alimentado el gusto por pintar lo que ve a la menor provocación, precisó que los espectadores son sensibles porque se sienten atraídos por un quehacer que les rememora algo: “todos tenemos una proclividad al dibujo que poco a poco nos la han matado”.

 

En Recintos y recuerdos el Centro Histórico de la Delegación Tlalpan marca el eje principal del estudio sobre formas de apropiación de lo público que no es sólo visual, sino también académico. El autor analizó en ese sitio la interacción gente-calle-plaza y plasmó sucesos de algunos pueblos mágicos.

 

Guzmán Ríos resaltó la importancia del pequeño formato, ya que es más práctico bocetar en libretas de viaje o papel porque “así establezco relaciones más directas y espontáneas”.

 

La exposición incluye lugares a los que viajó y que pictóricamente aportan otro tipo de imágenes. Algunas de las obras tienen escritas palabras que ofrecen una descripción sintética del momento previo a la ejecución o durante la intervención de la misma.

 

“Utilizo esta pintura porque es idónea para mis intereses. Soy arquitecto y he encontrado la forma de reivindicarla como una técnica cualitativa de la indagación, propia del estudio etnográfico”, detalló.