Imprimir
Número 398
6 de junio de 2018

LA UNIDAD LERMA, POLO DE DESARROLLO CIENTÍFICO Y CULTURAL EN EL ESTADO DE MÉXICO

*Tomó posesión José Mariano García Garibay como rector de esa sede universitaria

 

Con una ubicación privilegiada, la Unidad Lerma de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) debe aprovechar este valle lleno de oportunidades, sin dejar de reconocer su pertenencia a una institución fundada en la Ciudad de México, que es puerta de entrada al Estado de México, afirmó hoy el doctor José Mariano García Garibay.
 
Al tomar posesión como rector de dicha sede académica para el periodo 2018-2022 el profesor-investigador del Departamento de Ciencia de la Alimentación sostuvo que ésta constituye un elemento de vinculación relevante que podría evolucionar a la categoría de polo de desarrollo científico y cultural de la región.
 
La Unidad Lerma logró contar con mejores condiciones de trabajo y riqueza universitaria gracias a la gestión del doctor Emilio Sordo Zabay, por lo que “me comprometo a seguir laborando de manera eficiente y creativa con el fin de resolver las necesidades más apremiantes”.
 
La nueva encomienda “que asumo, la ejerceré con un alto nivel de entusiasmo y responsabilidad, utilizando las herramientas fundamentales de la democracia universitaria como son el diálogo, la tolerancia, la participación incluyente y el pleno apego a la legislación, y rechazando cualquier forma de violencia“.
 
Durante nueve años ha participado en el proyecto académico del quinto campus de la UAM, la aprobación y la configuración del modelo educativo hasta su desempeño como director fundador de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud.
 
Al impartir docencia, asesorar trabajos terminales, realizar investigación y participar en comisiones del Consejo Académico, García Garibay ha impulsado a esta comunidad, que cuenta con un grupo de profesores destacados y entusiastas, de los cuales 93 por ciento posee doctorado, un grado que registra 57 por ciento de la planta docente total de la UAM.
 
“Esta Rectoría deberá dar un mensaje claro de institucionalidad y apego a la legislación; de transparencia y eficiencia en la gestión en el uso de recursos, y proyectarse como parte de una universidad pública, federal y autónoma posicionada en el lugar que merece por su capacidad en la formación de recursos humanos, investigación y difusión” de la cultura.
 
La Unidad Lerma es viable, útil y necesaria para el entorno, para México y “tiene mucho que aportar al conjunto de nuestra Universidad Autónoma Metropolitana”, puntualizó.
 
El doctor Pedro Moctezuma Barragán, presidente en turno de la Junta Directiva de la UAM, expresó que en el proceso de auscultación finalizado el pasado 31 de mayo participaron 81 personas de todos los sectores de la comunidad, quienes corroboraron que García Garibay es un académico de probada experiencia que conoce la Unidad y “cuenta con las cualidades para avanzar en su consolidación, propiciando un ambiente incluyente y abierto a la vinculación con su entorno”.
 
También comentó que deben fortalecerse dinámicas colaborativas, multidisciplinarias, diálogos entre grupos y la habilitación de la infraestructura, destacando que “afortunadamente el compromiso institucional por el conjunto de la universidad, guiada por el rector general, doctor Eduardo Peñalosa Castro, ha dado sus primeros frutos como es la colocación de una segunda etapa de aulas ligeras”.
 
Aunado a ello informó que se ha otorgado la firma de contratos para concluir con el levantamiento de los espacios definitivos por 18 mil metros cuadrados de edificación y su respectiva habilitación física, la cual se tiene prevista en 65 por ciento para mediados de 2019, lo que “aporta certeza sobre la mejora de las condiciones de trabajo y de estudio”.
 
Los terrenos se localizan encima de un vaso lacustre amenazado por la urbanización, por lo que los temas vinculados a la conservación ambiental, la demanda de servicios de las comunidades vecinas, el rescate y manejo de los humedales deben plantearse como parte de sus proyectos emblemáticos, “así como la convivencia con los vestigios de las Ciénegas del río Lerma, su flora y fauna, y pueblos originarios.
 
“Al establecer este primer plantel en el Estado de México, la UAM ha abrazado plenamente su vocación metropolitana que incluye posibilidades de engarzamiento productivo con los cinturones industriales y de articulación con los procesos formativos de punta, tanto de la capital mexiquense como en los niveles nacional e internacional”.
 
El compromiso de la universidad continuará siendo vital para garantizar la maduración de las funciones de investigación, difusión y vinculación. “El papel de los distintos órganos colegiados así como el de los rectores de las unidades establecen la posibilidad de puentes colaborativos de trabajo”, aseguró. 
 
El doctor Sordo Zabay, rector saliente, expuso que entre los retos de esa sede académica se encuentra el aumento de la planta académica, la consolidación del modelo interdisciplinar definido ya por el órgano máximo colegiado y la mejora de las instalaciones y laboratorios; “tengo la certeza de que hemos dado el máximo esfuerzo contribuyendo eficazmente a la consolidación de esta Unidad y planteando colegiadamente un rumbo definido en nuestro plan de desarrollo.
 
“Las nuevas unidades no surgen más que del interés institucional y la necesidad social de aumentar la cobertura de calidad en educación superior” y desde 2009 la Casa abierta al tiempo en su Unidad Lerma aumentó el número de investigadores de tiempo completo a 216 y en los cuatro años de su gestión se incrementó la oferta académica de cuatro a nueve licenciaturas, más tres posgrados.
 
La demanda se ha triplicado, colocándose como la tercera opción educativa de la entidad, sólo por debajo de la Universidad Autónoma del Estado de México y de la Universidad Nacional Autónoma de México en sus instalaciones ubicadas en Naucalpan. De igual forma manifestó que la cantidad de alumnos por maestro pasó de menos de seis a 11, igualando los indicadores de la Unidad Cuajimalpa.
 
Sordo Zabay indicó que el porcentaje de alumnos dados de baja se redujo a la mitad y a la fecha la Unidad contabiliza 200 egresados y 60 por ciento de su planta docente pertenece a los sistemas nacionales de Investigadores (SNI) y de Creadores (SNC).
 
Los ingresos externos por profesor acumulado sumaron 200 mil pesos en los últimos tres años, además de que dio un impulso importante a la creación de las primeras ocho áreas de investigación, una de ellas interdepartamental.
 
“Sin duda hay mucho por hacer para que la Unidad siga ocupando en el futuro el papel de liderazgo científico y de protagonismo cultural que por naturaleza, vocación, responsabilidad social y merecimientos le corresponden”.
 
El doctor García Garibay es Químico Farmacéutico Biólogo con orientación en tecnología de los alimentos por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) es maestro en Ciencia de Alimentos por la Universidad de Reading, Gran Bretaña, y doctor en Biotecnología por la UNAM.
 
El investigador es miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), Nivel I, y obtuvo el reconocimiento de Perfil Deseable de Profesor de Tiempo Completo del Programa de Mejoramiento del Profesorado (PROMEP), de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
 
Al acto realizado en la Sala de Usos Múltiples del plantel universitario, acudieron los doctores Eduardo Peñalosa Castro y José Antonio De Los Reyes Heredia, rector y secretario general, respectivamente; miembros de la Junta Directiva, ex rectores, rectores de las unidades académicas, representantes de la Secretaría de Educación Pública del Estado de México y del municipio de Lerma de Villada, además de directores de división, jefes de departamento, profesores, trabajadores administrativos y alumnos.