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Número 323
9 de mayo de 2018

UNIVERSIDADES LATINAS PODRÁN IMPULSAR CRECIMIENTO

AL CUESTIONAR LA MODERNIDAD

*Las tecnologías digitales deben ser discutidas a partir de una nueva mirada del entorno y la naturaleza
 

 

En América Latina la demanda de conocimiento del mercado es débil y la de conocimiento social es alta, por lo que las universidades de la región deben propiciar un tipo de crecimiento económico distinto, al cuestionar la modernidad y la industrialización, señaló el doctor Matías Ramírez, investigador de la Universidad de Sussex, Gran Bretaña.
 
Las instituciones de educación superior latinoamericanas han manifestado un desarrollo diferenciado respecto de las europeas y las estadounidenses, ya que se han caracterizado por fundarse en un contexto de movimientos políticos e instar a sus estudiantes a la reflexión crítica.
 
En la conferencia Las instituciones de educación superior y la innovación sostenible y socialmente incluyente advirtió que “como humanidad es imposible seguir con el actual modelo económico, por lo que tenemos que repensar cómo vivimos e interactuamos, y eso implica un gran desafío para los centros educativos porque las tecnologías digitales deben ser discutidas a partir de una nueva mirada del entorno y la naturaleza”.
 
No obstante, la mayoría de las herramientas de política dirigidas a ciencia y tecnología no abordan de manera adecuada las necesidades de la sociedad, manifestó en el Seminario Internacional Opciones y desafíos en México para las instituciones de educación superior ante la sociedad digital.
 
Durante la mesa moderada por el licenciado Alfredo Camhaji Samra, asesor del Coordinador General del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT), el académico enfatizó que las innovaciones a emprender en los años siguientes no siempre significarán cambios positivos, ya que algunas invenciones consumen una gran cantidad de energía o de recursos naturales tornando más crítico el cambio climático.
 
“Hay que abrir un debate sobre qué tipo de crecimiento queremos y hacerlo sobre un conjunto de reglas estables para orientar el diseño sociotécnico, la formulación de políticas y el uso de tecnologías, lo cual se materializará en búsquedas de ingenierías compartidas en beneficio de la alimentación, el sistema de salud, la movilidad y la comunicación”, aseveró.
 
En el Seminario realizado en el Auditorio Arquitecto Pedro Ramírez Vázquez de la Rectoría General de la UAM, el especialista recomendó que las culturas de consumo sean más responsables y alcancen amplia participación social para lograr cumplir con verdaderos objetivos de desarrollo sostenible.
 
Ejemplificó que en Colombia están comenzando a aplicar esta visión para establecer sistemas sociotécnicos en los humedales que no eran sustentables con el fin de integrar las dimensiones agrícola, ganadera, de comportamiento cultural, vertimiento de residuos industriales y políticas de regulación, conservación y restauración del agua.
 
Lo anterior implica acudir hasta donde se encuentran las comunidades, efectuar un trabajo interdisciplinario, conocer a profundidad las prácticas locales, por lo que “nuestra propuesta es una agenda de investigación que aún está en proceso de formación, todavía hay mucho por aprender sobre las buenas y las malas innovaciones, ya que la intención es conducir al bienestar humano”.
 
La regulación es necesaria, pero no suficiente para atender todas las problemáticas sociales, lograr los verdaderos cambios transformadores o transiciones hacia la sostenibilidad. De tal forma que “México y Colombia pueden tener en común una plataforma soportada por académicos que trabajen en colectivo y con otros países”, finalizó.