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Número 253
7 de septiembre de 2015
 

INVESTIGAN EN LA UAM NUEVAS FORMAS PARA DETECTAR Y ATACAR EL CÁNCER DE MAMA

*A diferencia de la quimioterapia que ataca todas las células sanas y no sanas, las terapias dirigidas a nivel molecular utilizan marcadores que son específicos de las células cancerosas

 

*Se aplicaría un tratamiento temprano a una persona que desarrolla un tumor en el lugar, es decir in situ, y además podría asociarse a una forma de detección

 

Si sabemos cómo los estrógenos pueden transformar las células que generan el cáncer de mama y provocan su metástasis, es posible detectarlas a tiempo y proponer tratamientos, señaló el doctor Pablo Gustavo Damián Matzumura.

 

En entrevista explicó que “estudiamos un novedoso mecanismo a través del cual los estrógenos, que son las hormonas femeninas, generan cambios en las células causantes del cáncer de mama y pueden migrar ocasionando la metástasis”.

 

Refirió que a partir de una investigación que fue realizada por el entonces maestro Javier Esteban Jiménez Salazar –egresado del doctorado en Biología Experimental de la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)– se estudian nuevos mecanismos para poder atacar dicha enfermedad.

 

Los resultados fueron publicados en la revista Hormones and Cancer que edita la Endocrine Society, en conjunto con la prestigiosa editorial Springer, bajo el título Membrane-initiated estradiol signaling of epitelial mensechymal-transition associated mechanisms through regulation of tight junctions in human breast cancer cells, en donde el doctor Damián Matzumura es autor de correspondencia.

 

Cabe resaltar que en México el cáncer de mama es el más frecuente en mujeres y el de mayor mortalidad, pues según datos de la Secretaría de Salud se presenta un nuevo caso cada hora; sin embargo, también se señala que si es detectado a tiempo y en su primera etapa este mal puede reducirse.

 

El profesor-investigador del Departamento de Biología de la Reproducción de la Unidad Iztapalapa de la UAM detalló que en el trabajo “se encontró que tanto mujeres como hombres –éstos en proporción muy baja con respecto a las primeras– que presentan cáncer de mama poseen células que comienzan a transformarse. Afortunadamente, más de 95 por ciento de esas células es eliminado por nuestro sistema inmunológico, en este sentido, sólo un porcentaje bajo puede desarrollar cáncer”.

 

Sostuvo que en las mujeres en etapa reproductiva, los estrógenos producidos en su mayoría por los ovarios ocasionan que las células crezcan a una velocidad más rápida de lo normal, y esa proliferación, aunada a factores genéticos y ambientales, es una de las causas que puede inducir al cáncer de mama.

 

“El cáncer que se localiza en una región particular es más fácil de controlar que uno que migra, a este movimiento se le conoce como metástasis. Nuestra investigación se centra en el análisis de esas hormonas femeninas, es decir, sobre el proceso mediante el cual las células pierden contacto con células vecinas en un conducto mamario y toman características diferentes”, indicó.

 

“De un estadio normal, que denominamos epitelial, transita a una estructura de tipo mensénquimal, allí las células comienzan a moverse hasta alcanzar un vaso sanguíneo o linfático y circulan por todo el organismo. En el cáncer de mama, por lo general, las células cancerosas se albergan en el cerebro, los huesos y en los pulmones, en realidad la mortalidad es frecuente cuando se da la metástasis”, acotó.

 

Si conocemos bien estos procesos, dijo el coordinador del posgrado en Biología de la Reproducción Animal, podremos detectar y atacar a las células cancerosas antes de que puedan salir, de este modo se aplicaría un tratamiento temprano a una persona que desarrolla un tumor in situ, pero también podría asociarse a una manera de detección al observar las formas que adquieren las células en presencia de los estrógenos.

 

Así, si el sistema inmunológico no logra detectarlas, “nosotros podremos proponer algunos marcadores a través de los cuales sí se podrían identificar”, esto gracias al entendimiento de esos cánones, un procedimiento que se realiza a nivel molecular y celular.

 

Además, a diferencia de la quimioterapia que ataca todas las células sanas y no sanas, las terapias dirigidas a nivel molecular utilizan ciertos marcadores que son específicos de las células cancerosas.

 

En este caso, el doctor Damián Matzumura, también experto en endocrinología reproductiva y cáncer, refirió que puede recurrirse a una terapia biológica o a una hormonal, y es esta última la que ataca los efectos indeseables de las hormonas o de sus receptores sin dañar procesos reproductivos. Con la terapia biológica se evita lo anterior al ser mucho más dirigidas y al no atacar las células sanas.

 

Externó que su investigación la ha llevado a cabo durante los últimos cinco años en conjunto con profesores de otros grupos de investigación de la UAM, además de dos alumnos de doctorado, uno de maestría y dos de licenciatura.

 

Posteriormente, subrayó, los resultados que obtengamos deberán ser canalizados a la industria farmacéutica para comenzar a probarlos primero en animales, después debemos observar la respuesta de pacientes en etapa preclínica y luego en la clínica para llegar a los humano.

 

“Lo más importante es prevenir el cáncer mediante la autoexploración, es más efectiva y económica, algo que los hombres deben realizar ya que corren el riesgo; existe uno con dicha enfermedad por cada 999 mujeres”, concluyó el doctor Pablo Gustavo Damián Matzumura.