Imprimir
Número 218
30 de marzo de 2018

NOTICIAS FALSAS EN REDES SOCIALES BUSCAN INHIBIR LA INTENCIÓN DEL VOTO

*El uso de estos sitios en Internet para trastocar elecciones es uno de los nuevos focos de lucro internacional

 

El fraude electoral de 2018 se está gestando con la compilación masiva de información personal y la difusión de noticias falsas en redes sociales, sostuvo el periodista Jenaro Villamil Rodríguez, durante la mesa redonda México ante el riesgo del fraude electoral convocada por la Cátedra Miguel Ángel Granados Chapa de la Universidad Autónoma Metropolitana.

 

Las redes recogen las preferencias políticas en función de los likes y las publicaciones compartidas para luego insertar en el timeline informaciones que influyan en la percepción ciudadana de los candidatos y partidos.

 

Por medio de sitios creados ex profeso para difundir fake news se busca “desacreditar a algún líder de opinión o medio de comunicación sólido, sembrar confusión e inhibir la intención de voto, siempre apelando a las emociones elementales de los usuarios de redes sociales”.

 

A diferencia de cuando la televisión era el principal vehículo para influir en la intención del voto, las redes sociales son herramientas de mayor eficacia: “funcionan con los datos que nosotros mismos proporcionamos al algoritmo”.

 

Ya no se trata de inducir la victoria de un candidato o partido a través de la difusión masiva de spots, sino de golpes y tiros de precisión diseñados para llegar al target de usuarios que permitan viralizar una nota falsa o sobredimensionar una declaración”.

 

El analista político hizo hincapié en que el uso de las redes sociales para trastocar elecciones es uno de los nuevos focos de lucro internacional: “el fraude informativo-cibernético-emocional que está en curso, no tiene en el fondo un signo partidista, es en esencia el empleo de la big data y la meta data para hacer negocio”.

 

Jesús Ibarra Salazar, autor del libro Haiga sido como haiga sido, advirtió que los fraudes electores se dan actualmente en el sistema de cómputo a cargo del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE).

 

El resultado de las casillas y del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) no coincide en su totalidad con los votos registrados en el sistema de cómputo final; existen casos en que la diferencia entre los dos primeros y el segundo es desmesurada.

 

El también activista ejemplificó con la casilla 698 en Nuevo León durante la elección presidencial de 2006 (llevada a cabo por el todavía Instituto Federal Electoral) en la que el Partido Acción Nacional (PAN) había obtenido 198 votos según el conteo en la propia casilla, cifra que coincidía con el PREP, sin embargo en el conteo final se registraron 798 votos en favor del partido en ese entonces en el poder.

 

Ibarra Salazar, quien ha cotejado los resultados de las últimas votaciones acta por acta, asegura que la práctica de manipular las cifras desde el sistema de cómputo del INE es recurrente, ya que durante la elección presidencial de 2006 se presentó en aproximadamente 60 mil casillas.

 

El fraude electoral ya no es posible en la casilla debido a la vigilancia ejercida por los representantes de los partidos políticos y por los observadores, y aunque los primeros se desgastan intentando comprobar la compra de voto, se olvidan de revisar los cómputos finales, donde las cifras revelan un fraude irrefutable.

 

Román Cortázar Aranda, director de la revista El grito, señaló que cada tres años o cada elección en la que el sistema político se juega su supervivencia –por ejemplo en el Estado de México, Veracruz o Nuevo León– hay fraude orquestado por las mismas autoridades electorales”, por lo que “es una gran farsa salir a votar si el árbitro es también un jugador de la contienda electoral”.

 

Hoy la izquierda apuesta a ganar los comicios de 2018 por un amplio margen –continuó– a fin de que el manejo del voto no sea suficiente para consumar el fraude, “pero ese no es el punto, no se trata de cerrar los ojos (ante esta práctica), sino de respetar todos los sufragios emitidos”.

 

Villamil Rodríguez y Cortázar Aranda hicieron un llamado a “tomar con mayor responsabilidad la información que compartimos vía redes sociales” y corroborar las noticias que aparecen en los timeline de los portales de medios de comunicación de probada veracidad.