En la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) tenemos el reto de formar recursos humanos socialmente responsables que con profesionalismo atiendan las necesidades de salud en el país, dijo el doctor Salvador Vega y León, rector general de esta casa de estudios.
 
En la inauguración del 3er Simposio Iberoamericano en farmacia Social, Dra. Marina Altagracia Martínez. Farmacoeconomía: Calidad de vida, en la Unidad Xochimilco, el Rector General sostuvo que en la UAM se busca integrar enfoques y propuestas que contribuyan al tratamiento de las patologías más frecuentes, además de generar una cultura de la prevención, disminuir la desigualdad en la atención y mejorar la calidad de los servicios de salud de la población mexicana.
 
En su mensaje a los participantes provenientes de universidades mexicanas y del extranjero, recordó que la Casa Abierta al Tiempo ha sido pionera en impulsar la fármaco-vigilancia y la fármaco-economía en el país, y varios de sus profesores participaron en la elaboración de la primera norma nacional sobre fármaco vigilancia, así como en la realización de la primera guía para la conducción de estudios de evaluación económica para la actualización del cuadro básico de insumos del sector salud en México.
 
“Estamos convencidos de que dar continuidad a la generación de espacios de discusión de los estudiosos de la farmacia nos permite acercarnos cada vez más al cumplimiento de nuestro compromiso social como universidad pública”, puntualizó.
 
Reconoció la labor desempeñada por la doctora Marina Altagracia Martínez –quien falleció en junio de 2014– y junto con el doctor Jaime Kravzov han contribuido a entender que el aspecto social de la farmacia permite entender mejor el proceso salud-enfermedad y sobre todo la forma como el ser humano se enfrenta a un posible padecimiento y no sabe cómo comportarse.
 
La doctora Patricia Alfaro Moctezuma, rectora de la Unidad Xochimilco, dijo que la doctora Marina Altagracia era muy exigente, lo cual se reflejó siempre en la calidad del trabajo que desarrolló y en la organización de actividades como ésta.
 
La Rectora señaló que los temas de fármaco vigilancia, fármaco economía, los procesos que van desde la investigación, producción hasta la prescripción, el consumo y la contaminación del ambiente por el manejo inadecuado de desechos farmacológicos, son temas de especial importancia no sólo para quienes se dedican a este campo del conocimiento, sino para todos los profesionales de la salud.
 
El doctor Rafael Díaz García, director de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud de la Unidad Xochimilco, destacó que el grupo de las doctora Marina Altagracia ha trabajado en el sentido social de la farmacia; es decir, no lo ven como un negocio, tal como lo entiende una parte del sector de la industria farmacéutica, sino como la búsqueda del medicamento para la población de más escasos recursos, o que no tiene posibilidades de adquirirlo.
 
Resaltó también el trabajo realizado con medicamentos que a la industria farmacéutica no le interesa “porque no es negocio”. En el tema de fármacos huérfanos hay un referente y es el grupo de investigación que en la UAM desarrolla este trabajo, particularmente en el Departamento de Sistemas Biológicos.
 
Los objetivos de este simposio son: reconocer el esfuerzo y la dedicación de la doctora Marina Altagracia Martínez en sus actividades académicas y científicas en las ciencias farmacéuticas; difundir y compartir los avances en el conocimiento de la farmacoeconomía del consumo de los medicamentos prescritos por un médico y su efecto en la calidad de vida de los pacientes, así como divulgar las aportaciones de la farmacia social y su contribución a la salud de las sociedades humanas.
 
En la ceremonia inaugural estuvieron además el maestro Norberto Manjarrez Álvarez, secretario general de la UAM; la doctora Julia Pérez Ramos, jefa del Departamento de Sistemas Biológicos, y la doctora Dea Herrera Ruiz, presidenta de la Asociación Farmacéutica Mexicana A.C.