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Número 054

23 de enero de 2019

EDITA LA UAM EL PRIMER DICCIONARIO SOBRE PROTOCOLO,

CEREMONIAL Y DIPLOMACIA

*El autor y académico aborda estos asuntos, de gran trascendencia para la sociedad

 

El Diccionario de protocolo, ceremonial y diplomacia, del doctor Pedro Gabriel Labariega Villanueva, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), cubre un hueco en el ámbito de las ciencias sociales, ya que no existía en México un documento de esta naturaleza.

 

El académico del Departamento de Derecho de la Unidad Azcapotzalco opinó en entrevista para el programa Suplemento Semanario, que transmite UAM Radio 94.1 FM, que se trata de aspectos relevantes que “llevan a contemplar una vivencia en armonía y organización”, al tratarse de un concepto de orden.

 

Para los gobiernos y las sociedades, esos elementos son de gran trascendencia, pero en particular para los estudiantes de las ciencias sociales, porque como profesionales se integrarán a los sectores público y privado, a las secretarías de Estado e inclusive a ámbitos como las confesiones religiosas, donde también se llevan a cabo ceremoniales.

 

México vive una situación muy importante a raíz de los cambios en la administración, tanto a nivel federal como local y resulta fundamental que agentes diplomáticos y consulares conozcan cierta terminología para interactuar, no sólo con las dependencias gubernamentales, sino con organizaciones internacionales.

 

El doctor Labariega Villanueva sostuvo que las autoridades oficiales han descuidado aspectos de la formalidad que exige el protocolo, el ceremonial y la diplomacia, e incluso previo a la toma de posesión de Andrés Manuel López Obrador fue notoria la falta de conocimiento en cuanto a la recepción de los funcionarios internacionales.

 

El uso de los símbolos patrios, “parte de nuestra esencia nacional”, es un ejemplo, “porque el lugar donde se hicieron las entrevistas y se tomaron las fotografías de estos acontecimientos resultó fallido, lamentablemente”.

 

En el XVI Congreso Internacional de Protocolo en México 2018, realizado en la Unidad Azcapotzalco, “expresé la necesidad de que el gobierno federal tuviera gente muy capacitada en estas materias. Muchas veces se piensa que los embajadores tienen conocimiento sobre cuestiones de protocolo y diplomacia, pero la verdad no es cierto”.

 

“De acuerdo con mi experiencia en el servicio exterior mexicano, en el sexenio de Luis Echeverría y hasta 1985 en que salí de la cancillería”, los actos se hacían de acuerdo con una tradición y con base en una reglamentación jurídica que existía a través de un decreto del presidente Lázaro Cárdenas.

Dicha regulación “sigue existiendo pero nadie la conoce”, porque no ha habido ningún régimen posterior al del presidente Cárdenas que se haya preocupado por hacer un protocolo ideal de México para estar al nivel de los grandes países.

 

El investigador lamentó que en ocasiones “se quiere interactuar con grandes países, cuando a nivel educativo, al interior de las universidades ni siquiera tenemos una reglamentación protocolar”.

 

Para las universidades, entre ellas la UAM, también el tema es relevante porque nos da la pauta para que todas las actividades en las que participa el rector general y los rectores, así como las reuniones de los consejos académicos y el Colegio Académico, por ejemplo, sean más ordenadas, tengan una mayor presencia institucional y de impacto social.

 

Si bien la Casa abierta al tiempo no cuenta oficialmente con un protocolo autorizado por los órganos de la universidad, en la práctica existe cierto orden en los actos que en ella acontecen.