La Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y el Instituto Mexicano para la Justicia (IMJUS) firmaron un convenio de colaboración para desarrollar proyectos enfocados en asuntos de derechos humanos, justicia, democracia y migración, e impulsar prácticas profesionales y actividades de servicio social, artísticas y culturales.

Entre las primeras acciones establecieron trabajar en conjunto para dar seguimiento al proceso de creación de un banco de datos con perfiles genéticos que servirá para identificar a personas desaparecidas por causa de la inseguridad, la violencia y la migración.

La doctora Patricia Alfaro Moctezuma, rectora de la Unidad Xochimilco, explicó que en esa sede académica cuentan con un grupo de investigadores expertos en biología molecular para crear los perfiles de ADN y formar una base de datos, “de tal manera que si una persona está buscando a un familiar desaparecido dé su muestra de sangre y veamos si coincide, específicamente lo hemos pensado hacer con migrantes”.
 
La Rectora de la Unidad Xochimilco expresó que el convenio es acorde con el espíritu y los planes de desarrollo de la universidad. “Inicialmente habíamos planteado únicamente la creación de un banco de datos de ADN, pero con el tiempo hemos visto que la colaboración de trabajo puede extenderse a otros ámbitos”, resaltó.
 
Por su parte, el licenciado Juan Antonio Araujo Riva Palacio, director general del IMJUS, ofreció las instalaciones del organismo para que estudiantes y profesores-investigadores de la UAM realicen estancias académicas. “Estamos organizando los espacios para tener mayor capacidad de hospedaje”, puntualizó.
 
El instituto, detalló, promueve en varios lugares de la ciudad de México la construcción de espacios culturales, “además, nos interesa revivir los procesos históricos y revolucionarios” puesto que ayudan a profundizar en el análisis académico de su estudio e incluso se han complementado con algunas representaciones teatrales.
 
Al respecto, precisó que están desarrollando nexos importantes con la Secretaría de Cultura y otras organizaciones, “lo cual ofrece la posibilidad de impulsar el ejercicio de juicios que el Instituto ha llevado a cabo en torno a personajes históricos del país, en los cuales confluyen academia, novela, política y teorías del derecho”, subrayó.
 
El licenciado Gabriel Alejandro Dombek Nusymowicz, director de difusión cultural del IMJUS, externó su interés por promover adicionalmente al tema legal, lo cultural. “Es una línea que el instituto vincula con cuestiones sociales mediante presentaciones de libros, ciclos de cine o literatura, obras teatrales, mesas y coloquios relacionados con juicios históricos”, indicó.
 
El organismo, expuso, está impulsando la apertura de una escuela para la justicia con tres carreras: Ciencias de la integración, Artes escénicas y Criminalística, “con el propósito de cubrir las carencias que presenta el nuevo sistema penal acusatorio”.
 
Acudieron al acto protocolario de firma el licenciado José Antonio Parra Molina, rector del Consejo Mexicano de la Sociedad de Estudios Internacionales; Gildardo Cruz Velasco, director general de Laboratorios Criminalísticos de la Coordinación de Servicios Periciales de la PGR; Ludovic Pareses, responsable comercial de la empresa Safran, especializada en el desarrollo de equipo analítico para perfiles genéticos.
 
Además de Cristina Chapela Pérez, directora general adjunta de la Unidad de Desarrollo e Integración Institucional de la Comisión Nacional de Seguridad, quien enfatizó su interés por participar en la conformación de una base de datos de ADN en conjunto con las áreas de seguridad pública de la Ciudad de México y el resto de los estados de la República.
 
Por parte de la UAM asistieron la maestra Miriam Calvillo Velasco, coordinadora de Planeación, Vinculación y Desarrollo Académico (COPLADA) de la Unidad Xochimilco, y los licenciados Jaime Miguel Soto Blanco y Sergio Giovanni Padilla Meneses, de la misma coordinación. y por la aprobación social respecto a los cánones de belleza en turno; sin embargo, el riesgo de una obsesión es que conduce a trastornos psicológicos y alimenticios que provocan anualmente la muerte de miles de jóvenes.